Desde el cielo...

Querido Niño Jesús:

Te escribo esta cartita, simplemente para decirte: Felicidades desde lo más profundo de mi corazón.

Sé que el pasado día 25 de diciembre celebraste tu cumpleños, y de hecho, lo debiste de hacer por todo lo alto; pues yo no hacía más que ver regalos en todas las casas, espléndidos banquetes, luces y adornos por todas partes y niños, como yo, cantando villancicos a cambio de un aguinaldo. Supuse que todos estaban preparándote una gran fiesta sorpresa.

Siento no haber podido acudir a esa gran fiesta sorpresa, que, supongo, celebraríais en un gran palacio. Siento no haber podido estar presente en el día de tu cumpleaños. Siento no haber podido hacer un regalo tan grande como los que los niños te tenían preparados en sus casas (junto al árbol).

Pero quiero que sepas que, desde el hospital, mamá, papá, mis hermanitos y yo, nos acordamos mucho de tí y de hecho, pusimos un bonito Belén que hizo papá en el taller y que después, todos pintamos con alegría e ilusión.

Te tuvimos muy presente cuando encendimos las velitas y rezamos una pequeña oración todos juntos. Cuando el médico vino a darnos la noticia. Cuando, de repente, todo se apagó y comenzó a dar vueltas.

Y, sobretodo, cuando, finalmente, pude estar contigo, junto al abuelito y la abuelita y vimos, desde el Cielo, a mamá, papá y a mis hermanitos, que aunque estaban tristes, no dejaban de sonreir y rezar a Dios, tu papi.

Gracias por estas Navidades, han sido muy especiales para mí, Jesús.

Con cariño.

Un angelito muy pequeñito.

Héroes

Ser héroe no significa buscar alcanzar un perfeccionismo absurdo, que enseguida se derrumbe; ni ser reconocido como una super-persona por todo el mundo; tampoco significa realizar un acto heroico una vez en la vida; ni tan siquiera lograr hacer lo que los demás esperan de uno mismo.

No. Ser héroe es luchar por unos ideales bien arraigados; darlo todo, hasta el último hálito de vida y esperanza; ser radical y constante, y no dejarse arrastrar por nada ni nadie; buscar cambiar el mundo usando las cualidades o aptitudes que le han sido concedidas, y lo más importante, creer en que todo esto es posible.

"Héroe es aquél que
consagra su vida a algo grande"

"No eres un héroe para que te honren,

se trata de usar los dones que se nos han dado

para ayudar a toda la gente que puedas"

I enmascarada, V de Vendetta, Máximo Décimo (Gladiator), Superman, Gooku, Wolverine, Batman, Légolas, Anakin Skywalker, Neo, Leónidas, Hércules, Madre Teresa, Martin Luther King, Franz Reinisch, P. Joseph Kentenich ...

Gracias Ignasi

¿Oda a la poesía? Tal vez...

Suave deleite de eterna poesía.
Dulce aroma impregnado en mil y un versos.

Sutil armonía entre cada sílaba.

¿Quién no es capaz de apreciar esto?

Intensidad mágica en cada frase.

Inherente cohesión al sentimiento.

Oscuro crepúsculo en cada final.

¿Quién no es capaz de vivir esto?

Mi alma vertida en un trozo de papel.
No miento ni oculto mis sentimientos.

Tal vez, la única forma de expresarme,
¿Quién no es capaz de apreciar esto?

No puedo abrazarte ni contemplarte.

Mas puedo amarte, sentirte y buscarte.

Eres la más bella dicción del alma.

Bien sabes que excedemos en palabras.

... Existen demasiados fonemas, lexemas y morfemas, triviales y carentes de sentido, en el mundo contemporáneo, los tenemos ya muy vistos. La poesía les otorga sentido de existencia, y utilidad, aunque a veces las palabras no sean suficientes; siempre han sido un bello recurso ...

Música de invierno.

Mientras mis dedos acariciaban las nuevas y resplandecientes cuerdas de mi guitarra, un estremecimiento recorría mi cuerpo y lo marcaba violentamente cual puñal de hielo hubiera hecho en su lugar.

El clavijero estaba sometido a una perfecta e inigualable proporción áurea; cada clavija, independiente de las demás, pero, a su vez, inacabada en soledad...los remates dorados...

Cuando pulsé la primera cuerda por vez primera reberveró un tímido eco que se apagaba conforme iban sucediéndose aquellos oníricos segundos de fantasía, uno tras otro; también ahogado por el impaciente apremio de la siguiente nota.

Cada traste era único, pero semejante al resto, la distancia, menor cuanto más se alejaba uno. Creo que se basaban en una sucesión geométrica, no lo sé. El tercero... me acuerdo perfectamente, era mi preferido, la cejilla apoyada sobre él con suavidad.

Mi primer acorde: probablemente un SolM, tal vez un DoM, o quizás un Lam, no lo recuerdo con claridad ni exactitud, lo que si que tengo claro, es que fue débil e inseguro, un poco desafinado diría yo.

Pero como infatigablemente se encargan de repetir dos grandísimas personas, las notas desafinadas dan igual, porque Dios y la Mater les dan sentido.

Caminante, no hay camino, se hace camino al andar [...]

Guitarrista, no hay melodía, se compone al soñar [...]

Aún queda un largo camino, que ha de recorrerse poco a poco...

Admira Solista.

Abierto al mundo

Cierto día, en clase, miraba por la ventana, (mientras me balanceaba en mi estupenda silla verde, claro); en ese momento no hacía otra cosa que contemplar el paisaje a través de los no precisamente nítidos cristales del aula. Ni siquiera oía las continuas explicaciones de mi profesora de Literatura Universal, (que suelen resultarme interesantes).

En aquel instante mis ojos se movían al son de los acordes melodiosos del vaivén de la suave pero gélida brisa de invierno. Mis pupilas seguían con la curiosidad de la niña que soy, los rápidos movimientos de las hojas, levantadas por las intermitentes ráfagas de aire. Mis iris hacían el esfuerzo de contraer y dilatar mis pupilas, al tiempo que, las nubes se ocultaban y jugaban a esconderse detrás del sol.

El paisaje que ante mí se abría, impresionaba y captaba mi atención cual obra de Monet, la ladera de la montaña se abrigaba bajo una gruesa capa de pura nieve. El cielo, envuelto en llamas por el amanecer. El pueblo y toda su arquitectura, bañados en un suave barniz de fresca luz matutina...

Y yo, encerrada en el aula, eso sí, haciendo un fascinante ejercicio de literatura automática con 30 amigos y compañeros en mi misma clase, ya que que medio personal docente estaba de huelga. No obstante, nosotros, los chavales, a dar clase, como acostumbramos a hacer cada día...

Una gran obra

Creo que el Cielo, y, por extensión, el Universo; puede llegar a ser todo lo grande que uno quiera imaginar, no obstante, se precisa una mente prodigiosa para llegar a concebir todo lo que realmente significa el concepto UNIVERSO.

Porque es tan inmensamente grande que contiene todo lo que existe y conocemos, desde un simple átomo de deuterio, hasta la más grande de las galaxias, esto resulta muy evidente.

Pero: ¿Quién no se ha planteado las eternas preguntas "hasta donde llega el Espacio o Cosmos o Taikos o Universo"; "que hay más allá de todo lo que conocemos"; y, no sé si por alusión o no; pero "cual es el sentido de mi vida"?

El sentido de una vida, podría ser, simplemente, asombrarse y agradecer por todo esto a Aquél que lo creó:

Un pétalo de rosa, una gota de perfume (¿parfum vert foncé?), un poco de litio, hielo y polvo, una estrella de neutrones, pero sobre todo... lo que tú y sólo tú quieras y alcances a imaginar...

Un mundo reversible.

¿Por qué no seremos capaces de deleitarnos con la belleza cuando la tenemos delante de nuestras propias narices? ¿Por qué tenemos que esperar a que se marchite para fijarnos en “lo bello que era”?

¿Por qué nos conformamos con lo más fácil, sabiendo que deberíamos aspirar a lo más alto siempre? Y entonces; ¿por qué luego envidiamos lo ajeno?

¿Por qué la sociedad se jacta de progresar hacia la más avanzada tecnología, si se siguen infringiendo los derechos más elementales de los seres humanos? ¿Por qué no se empieza por proteger la vida de cada hombre y mujer, y luego ya hablamos...?

¿Por qué todos se empeñan en criticar a los jóvenes? Mientras que no todos somos así. Oigan, que algunos adolescentes regalamos tiempo de nuestras vacaciones en ir a un comedor y parroquia de Móstoles a repartir alegría, esperanza y espíritu navideño; en ir a repartir bocadillos y mantas a gente necesitada en Ópera; en ir a cantar villancicos el día de Nochebuena a un hospital; en ir a misionar a tres pueblos de Madrid...

¿Por qué a los medios de comunicación no les importa la buena gente? Oigan; que existimos, aunque no lo crean o se nieguen a creerlo.

¿Por qué nadie se fija en que, por cada minuto que pasa, mueren niños de hambre y enfermedad en África? ¿Y sin embargo estamos tan preocupados por la actual crisis económica? ¿Acaso no vivimos suficientemente a gusto con nuestras tres comidas diarias y agua caliente asegurada?

¿Por qué vivimos cada día de la misma manera y luego, llegado el momento, deseamos que todo hubiese sido diferente...? ¿Por qué no aprovechamos cada día como una oportunidad única que se nos brinda, deseando que sea una nueva y fascinante aventura?

¿Por qué no damos las gracias a Dios por cada día que amanece? ¿Por qué tenemos que esperar a que ocurra algo extraordinario para hacerlo? ¿Acaso Dios no es Dios los 365 días del año, las 24 horas del día y los infinitos momentos de cada minuto?

¿Y por qué es cuando algo (o alguien) nos falta, cuando comenzamos a valorarlo de verdad?...